sábado, 1 de noviembre de 2008

VIOLENCIA CONTRA LA MUJER Y VIOLENCIA FAMILIAR EN ARGENTINA

  • Considerado un problema de derechos humanos y de salud pública, la violencia familiar está presente en una de cada cinco parejas en el mundo.
  • Una de cada tres mujeres puede sufrir abusos y violencia en el transcurso de su vida.
Todo esto constituye una atroz violación a los derechos humanos.
Especialitas de todo el país certifican que el número de denuncias que realizan las mujeres que sufren abusos físicos y psíquicos, va en aumento. De todos modos, aclaran que aún se denuncian menos de la mitad de los casos que ocurren a diario.

Los últimos datos recogidos a nivel nacional, indican que la mayoría de las víctimas están casadas y tienen hijos. Entre enero y septiembre de este año, un total de 21.066 mujeres llamaron a los Centros Integrales de la Mujer denunciando distintos tipos de violencia (física, psíquica o sexual). Según detallan informes, el 31,3 % de las denunciantes tiene entre 35 y 44 años.
Las jóvenes de 15 a 24 años son las que padecen menos agresiones; sin embargo en esa franja etaria el porcentaje de asesinatos es mayor. Además, el 53,9% de quienes llamaron a estos centros están casadas, tienen hijos (83,4%) y terminaron el secundario (30,32%).
La especialista Noemí Aumedes destacó que en promedio "las mujeres soportan un tiempo de maltrato que supera los 11 años". Las que llamaron a estos centros comunales primero solicitaron asistencia legal, pero terminaron pidiendo apoyo psicológico.
El ministro de Salud, Alberto Mazza, reconoció que "la violencia contra la mujer es un grave problema de salud pública".

Para los especialistas, la violencia contra la mujer se da dentro de un "círculo de violencia familiar". La especialista en familia y docente de Violencia Intrafamiliar y Sexual en la carrera de Derecho de la UBA, Leonor Vaín, dijo que "al golpe agudo le sigue una luna de miel donde el hombre se arrepiente, pide perdón y jura que no repetirá su conducta".

Paso a paso, del cariño a la agresión

Los especialistas definen a la mujer golpeada como paralizada al comienzo y hasta con sentimiento de culpa: poniendo mal la mesa, luciendo poco sensual o antipática, cree que no cuida debidamente la institución del matrimonio.
La doctora Vaín detalló que al romance lleno de promesas le sigue muy de cerca "la tensión que vuelve a acumularse" hasta que estalla en nuevos golpes.
El remanso de golpes, opinan los abogados, cada vez dura menos tiempo y es cada vez menos creíble para la misma pareja, que después de repetir la situación de violencia ha desdibujado la percepción de peligro y delito. "En general, los hombres golpeadores no saben expresar sus sentimientos y son muy cerrados. Aunque en el mundo público son simpáticos y muy queridos por la comunidad" señaló Vaín.
La psicóloga social María Esther Gómez, que coordina un grupo de violencia doméstica del Programa de Salud Mental del Hospital Pirovano, explicó que "la pareja se transforma en violenta. Los dos presentan cuadros de baja autoestima, desvalorización y dependencia". Según Gómez, "la mujer golpeada depende para todo de las decisiones de su marido y el hombre necesita tener todo controlado".
En muchos casos, la mujer no hace la denuncia porque no sabe que es víctima de un delito y está amparada por la ley.

Perder el control

  • "La violencia no depende de lo económico ni de la formación, sino del aprendizaje cultural. Este es uno de los tantos mitos que sobreviven en este terreno. De la violencia hace uso un hombre sin educación y hasta un médico cirujano; un hombre sin trabajo y uno que tiene varias cuentas abiertas en un banco…", explica Analía Vega, coordinadora de los equipos interdisciplinarios de la Dirección de Coordinación Política de Géneros.
  • Los embarazos suelen aumentar los niveles de violencia, por lo que es frecuente que a los hospitales lleguen mujeres con pérdidas y con golpes que suelen ser fatales para la madre y para la criatura. "Por lo general, en el marco de la violencia familiar los golpes están dirigidos a la cabeza de la víctima. Durante el embarazo, lo más frecuente es que vayan hacia la panza, los senos y los genitales", señala Vega.
  • Aunque son menos, también los hombres pueden sufrir maltrato. La psicóloga social Silvia Fairman explica en su libro El hombre maltratado por su mujer que estos casos no son reconocidos por la Justicia, ni por la policía ni por la población: "En la Argentina no suele haber cifras de maltrato en los hombres porque no se animan a hacer la denuncia. Menos aún sin son golpeados por sus compañeras."

PARA DENUNCIAS Y CONSULTAS:
Consejo Nacional de la Mujer www.cnm.gov.ar

En el otro blog "En la otra mitad... El trabajo en lo echado a perder" (tenés el link acá arriba) informo sobre una campaña de UNIFEM que está recolectando firmas (estaría bueno que firmes) y adjunté el link para AAPVF, ellos no sólo te informan sino que realizan prevención y te pueden ayudar si vivís este bajón... En lo personal, fui hija de una mujer golpeada que a su vez golpeaba... a mí. En ese momento, el tema no tenía tanta repercusión como ahora, y si bien las denuncias aumentan, y ojalá se entienda lo que quiero decir..., eso es algo positivo. Ahora las mujeres se animan a hacer dicha denuncia, hay entidades que ayudan ya sea desde lo legal, ya desde la salud (brindan apoyo psicológico).
No pude dejar de sentir todo el tiempo mientras leía publicaciones, trabajos y artículos que, si bien las mujeres son muy perjudicadas, la población infantil lo es más aun. La mujer soporta la agresión del hombre generalmente, mientras que los hijos la soportan de ambos. Tal vez esto sea una proyección personal y esté equivocada...
Muchos golpeadores ejecutan su violencia frente a sus hijos, la mujer en algún momento también estalla y esa casa se transforma en un infierno... Lo peor es que esto es debido a un aprendizaje cultural. Pega el abuelo, el padre, el hijo y el hijo del hijo y así...NADIE TIENE QUE SOPORTAR ESTO, NADIE. NO IMPORTA EL SEXO, LA EDAD... Porque a los viejos también les pegan, sea en el geriátrico de poca monta, sea en la casa porque con su demencia senil, arterioesclerosis, o el sr. alemán que lo visitó, el anciano irrita a toda la familia y sobre todo a quien lo cuida que termina "perdiendo el control". Y de eso no se habla casi...
El abuso de poder es exactamente eso, y siempre hay un pez más grande (sino miren Buscando a Nemo...) y ojalá, ese pez más grande sea la Justicia (así evitamos la que es a mano propia), porque el abuso sexual y la violencia doméstica es UN DELITO y hay una legislación que así lo afirma.

  • CATAMARCA: + de 2.000 casos por año.
  • ENTRE RÍOS: 5 mujeres asesinadas (FEMICIDIOS) en 5 meses.
  • TUCUMÁN:+ de 1.300 casos por año.
¡¡¡BUSQUEN AYUDA... NO SE PARALICEN!!! CUANTO MÁS DEMOREN MÁS DAÑO HABRÁ.

FUENTES:

http://www.tiempofueguino.com.ar/cms/tiempofueguino_sp/content/view/5403/41/

http://www.lanacion.com.ar/nota.asp?nota_id=807154

http://www.periodismosocial.net/notacompleta.cfm?id=3449



1 comentario:

Anónimo dijo...

EN CASA HABLAMOS!!!!